Si alguna vez has pensado “No aguanto más, no quiero estar con mis hijos…” tranquila, no te culpabilices, vamos a cambiarlo… YA!
Seguro que has tenido esa sensación amarga de “no quiero estar con mis hijos”, de decir:
No puedo más da igual lo que haga. Mis hijos no me hacen caso y encima me odian y para colmo… todo son discusiones con mi pareja”
¿Te suena verdad?
En estos momentos es más que nunca necesario que te tomes un respiro, pero ¿cómo se hace eso teniendo hijos? No te preocupes, en este artículo te daré unas sencillas claves para lograrlo sin morir en el intento, ¿preparad@?
Claves para “volver” a querer estar con tus hijos
- Unos minutos son más que suficientes para “desconectar” y volver a conectar.
- Si ves que estas a punto de estallar… Para! Se puede. Tu cerebro te da 10 segundos de oportunidad para hacerlo. No te dejes llevar por la ira y no tendrás el sentimiento de culpabilidad que nos invade justo después.
- Menos es más. Usa las palabras necesarias para esa situación, nunca utilices más de 10 palabras, es a partir de ahí donde se convierte en sermón y no ayuda ni a los niños ni a ti.
- Dile a los niños que necesitas un descanso. Prepárate tu infusión preferida, escucha tu canción favorita, lee, siéntate a ver algo en la tv… lo que sea que te permita tapar tu cerebro.
En un taller me dijeron un día algo muy revelador y desde entonces lo aplico:
Seguramente tu madre te dice, con toda la razón, que tienes que cuidarte, sacar tiempo para ti misma… Y tu, seguramente, le respondas con la famosa frase “si ya… qué más quisiera yo” pero se puede y se debe.
En otra ocasión me contaron una historia que te muestro a continuación para que entiendas la importancia de lo que digo:
Una amiga que es azafata de vuelo nos cuenta cómo las madres que viajan en avión, en su primer instinto en caso de ocurrir algún percance en el vuelo, es ponerle primero la mascarilla a su hijo, éste es el error más común, ya que en caso de necesidad, debe ponerse la mascarilla la madre primero y, con ella puesta, ponérsela a su hijo, porque de lo contrario si a la madre le falta el oxígeno y se desmaya, difícilmente va a ocurrir que sea su hijo quien, presa del pánico, se la ponga a su madre.
Este ejemplo, que esperemos no tener que vivir jamás, nos muestra como hacemos en el día a día. Primero ponemos la mascarilla a nuestros hijos y llegamos ya sin aire a poner la nuestra y desde esa situacion, desde ese agotamiento físico y mental… ¿quién puede cuidar de otros y quien puede hacerlo disfrutando, sin estresarse?
Cierra los ojos y recuerda por qué querías ser madre y quédate con ese momento… La infancia se termina y no dura para siempre”
y tu… ¿cómo consigues “volver” a querer estar con tus hijos? Cuéntanoslo…
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¿No te funciona lo que haces a diario con tus hijos? ¿Quieres cambiar tu forma de ver la crianza y la educación?
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Psicóloga, Educadora Certificada en Disciplina Positiva para Primera Infancia, Aula, Familia, Pareja y Empresa. Fundadora de InfanciaenPositivo.com, ante todo, Madre.
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Hola me gustaría una sesión personalizada. Llevo muy mal la crianza de mi hijo de 7 y otro de 4. Se portan mal y lo he probado todo. No funciona nada. En positivo no me escuchan y castigando tampoco.
Estimada Noelia,
Primero me gustaría agradecerte la sinceridad y valentía que has demostrado dejando tu comentario.
Aunque pasa más veces de las que creemos, siento que tengas tantos retos en la crianza de tus hijos, son edades complicadas y conozco de “primera mano” lo frustrante que llega a ser, pero recuerda que nunca debemos darnos por vencidas, en la crianza no, aunque te notes sin energía, sin fuerzas, recuerda que somos muuuuchas las madres (y padres) que nos apoyamos alentándonos unas a otras.
Para la sesión personalizada te enviaré un email, además puedes rellenar este formulario para sesiones, estaré encantada de ayudarte.
Atentamente,
Diana.