Semana 42 • Herramienta 42 de 52 de Disciplina Positiva
¿Sabes qué son las Preguntas de Curiosidad? ¿Sabías que hacer preguntas es una herramienta educativa? Hoy, en #PorfinesViernes, la herramienta:
Preguntas de curiosidad
Photo by Bearfotos / Freepik.com
Poniéndonos en situación
Te propongo elegir una de estas opciones:
- “Hijo, es tarde, lávate los dientes!”
- “Hijo, es tarde, ¿qué había que hacer después de cenar?”
Seguramente las dos conduzcan al mismo resultado… o no ? sólo hay una manera de saberlo: ponerlo en práctica. En demasiadas ocasiones, las madres “suponemos” y se nos olvida “verificar” lo que hemos supuesto.
¿Te gusta o agrada que te ordenen cosas, tu pareja, tu jefa/e, familiares…? Si bien es cierto que seguimos órdenes (por ejemplo, aceptar que la guardia civil te ponga una multa por exceso de velocidad) y también es cierto que muchas veces nos las saltamos (como, por ejemplo, cuando alguna vez has ido más rápido que los 40 km/h que marcaba la señal de tráfico).
Realmente, a nadie nos gusta que nos den órdenes, sin embargo, a todas nos gusta que nos digan las cosas bien. Esto mismo, también se aplica con nuestros hijos.
¿Por qué usar preguntas de curiosidad en vez de órdenes?
A continuación, te doy algunas razones para empezar a usar las preguntas de curiosidad:
- Cuando te dicen lo que tienes que hacer, sólo tienes 2 opciones: aceptarlo y hacer lo que te ordenan o rebelarte, en cambio, que te pregunten “qué tienes que hacer”, te deja “la pelota en tu tejado” y depende de ti hacerlo o no hacerlo.
- Otra razón por la que usar las preguntas de curiosidad es porque la respuesta que surge de ellas evita el tan temido NO.
Por ejemplo:
Hijo, ponte el pijama”
“No”
“Que te lo pongas te digo”
“Noooo”
“Hombre, ya te digo yo que te lo pones, todas las noches la misma historia…”
“Noooooooo”.
¿Cómo poner en práctica la herramienta: Preguntas de Curiosidad?
Para poner en práctica esta herramienta es muy importante tener interiorizados los principios de la Disciplina Positiva. Es cierto que con todas las demás herramientas también, pero con esta, especialmente, puesto que si no tenemos integrados los principios, nos costará mucho aceptar que una pregunta conlleva una respuesta que, en ocasiones, no nos va a gustar y tendremos que saber cómo afrontarlo.
Es decir, preguntar supone esperar recibir una respuesta y aceptarla, nos guste o no. Una vez que tengamos la respuesta, ya veremos qué hacer con ella, pero lo primero es aceptarla.
Por ejemplo:
Hijo, ¿qué hay que hacer antes de ir a la cama?”
“Jugar con los juguetes, papá!”
En el ejemplo anterior, prueba a actuar del siguiente modo:
- Primero, evitaremos el ¡NO! (que nos vendrá a la cabeza) ya que, cuando escuchamos un “NO” nuestro cerebro entra inmediatamente en “modo alerta” y nos ponemos a la defensiva (cocodrilos totales).
- Después, provocaremos una conversación para poder llegar a alguna conclusión nueva: “Bien, mi hijo tiene sentido del humor”.
- Ahora a agudizar el ingenio:
Uy! eso estaría genial… ¿Te imaginas? Antes de irnos a la cama, nos vamos jugar otra vez y… ¿No pararíamos nunca? Es muy divertido jugar… a mi me encanta.
¿Sabes que cuando yo era pequeño jugaba mucho?…”
Y la historia continúa, mientras, vais yendo juntas hacia la cama, a ponerse el pijama, lavar dientes, leer cuento… lo que toque. Todo esto puede hacerse como un juego.
En el siguiente vídeo te muestro cómo, de una forma divertida, mi hijo pequeño de 5 años, coloca los zapatos de la calle en su sitio (el desorden en casa no suele ser tanto a diario, estaba a medias con limpieza y montaje de muebles ? ).
Si lo piensas, NO te va a llevar más tiempo que una discusión, una lucha, una reprimenda o un enfado con tu hijo porque no quiera lavarse los dientes (o mejor dicho, no que no quiera, sino que se rebela a tu “orden” de que lo haga y eso es lo que no quiere aceptar, porque cuando se lo propones, le preguntas o juegas, sí que lo hace).
¿Cómo interiorizar los principios de la disciplina positiva para conseguir hacer Preguntas de Curiosidad?
Como te decía anteriormente, es muy importante interiorizar los principios de la Disciplina Positiva antes de aplicar esta herramienta.
Es necesario no olvidar que cuando hacemos preguntas de curiosidad porque nos han dicho que es mejor preguntar que ordenar, en muchos casos tendemos a añadir un “tono irónico”, con lo que pierden toda su “efectividad” y se acercan más a la falta de respeto.
A ver Pedrito, ¿qué tocaba ahora después de jugar?
¿Lo sabes o no lo sabes?”
Antes de esto, es mejor dar una orden porque, al menos, el niño sabrá que puede rebelarse o que es mejor no hacerlo, pero del otro modo se siente confundido…
¿Respondo lo que realmente me nace o lo que creo que mi padre quiere oír?”

En definitiva…
Se trata de sentido común y, sobre todo, de mucha conexión, pensar en ser el adulto que nos habría gustado tener cuando fuimos niños y entender que nuestras prioridades no son las suyas.
¿Tanto nos cuesta aceptar que sólo tienen una infancia y es importante educar sin olvidar que el mensaje del amor debe llegar siempre?
Bueno, te dejo con esa pregunta de curiosidad, me encantará conocer la respuesta y por supuesto, aceptarla, sea cuál sea 😉
Si te ha gustado este post y quieres profundizar en nuestro método de educación y crianza respetuosa puedes asistir a uno de nuestros Talleres ➡ Próximos Talleres de Disciplina Positiva
Todas estas Herramientas de Disciplina Positiva están disponibles en nuestro juego de cartas Tarjetas de Disciplina Positiva en esta web ➡ Tienda de recursos y herramientas de Disciplina Positiva
¿Crees que no te funciona lo que haces a diario con tus hijos? ¿Quieres cambiar la forma de ver la crianza y la educación?
Si quieres aprender más sobre la Disciplina Positiva, conocer su método y técnicas y aplicar sus herramientas apúntate a alguno de nuestros talleres, comprobarás como sí, existe un método que funciona. 😉

Psicóloga, Educadora Certificada en Disciplina Positiva para Primera Infancia, Aula, Familia, Pareja y Empresa. Fundadora de InfanciaenPositivo.com, ante todo, Madre.
___________________________________________________
Con Disciplina Positiva otra educación es posible, sin gritos, amenazas o castigos. Una educación firme y amable con herramientas respetuosas y efectivas.